El mercado laboral no se basa solo en tener un título, o en acumular buenas notas. Cada vez más nos encontramos con que las oportunidades profesionales surgen a través de personas: contactos, recomendaciones, relaciones profesionales… En este contexto, el networking se ha convertido en una de las herramientas clave, especialmente para los estudiantes de Formación Profesional. Si aún no habías escuchado hablar de este término, hoy te contamos por qué es importante. Porque está lejos de ser algo reservado a profesionales con años de experiencia: es algo que debe empezar en el aula.
Qué es el networking y por qué es clave en la FP
El networking es, en realidad, un proceso complejo que consiste en crear, desarrollar y mantener relaciones profesionales con personas que puedan aportar valor a tu carrera. Pueden ser compañeros de clase, docentes, profesionales del sector, empresas, reclutadores… No es solo conocer gente, sino establecer vínculos reales basados en el interés mutuo, en compartir experiencias y en aprender del otro.
En el ámbito de la FP, este networking adquiere una mayor relevancia por diversos motivos. En primer lugar, porque está estrechamente ligada al tejido empresarial: cuenta con prácticas obligatorias y, además, una orientación muy clara a la empleabilidad. Esto implica que el contacto con empresas no es, ni mucho menos, algo excepcional. Forma parte del propio itinerario.
Además, cabe señalar que muchos puestos de trabajo no se publican en portales de empleo como LinkedIn. Las vacantes se cubren mediante recomendaciones, antiguos alumnos, contactos previos… Y tener una red profesional activa puede llegar a marcar la diferencia a la hora de enterarte o no de una oportunidad laboral.
Como punto añadido, debes saber que el networking no solo es interesante de cara a encontrar un puesto de trabajo. También lo es para conocer mejor el sector, identificar salidas profesionales y aprender de la experiencia profesional de otros. Es una forma muy inteligente de mejorar tu empleabilidad desde el mismo inicio de tu carrera.
Beneficios del networking para futuros profesionales
Son muchas las ventajas asociadas a construir una red de contactos mientras estudias, no solo a largo plazo, sino incluso a corto. Una de las más evidentes es que tendrás acceso a grandes oportunidades laborales: un profesor te recomienda, un tutor de prácticas confía en ti o un contacto te avisa de una vacante. Son solo ejemplos de cómo un empleo que no te hubiera llegado por otros canales se acaba convirtiendo en una gran oportunidad.
Otro de los beneficios clave es el hecho de que adquieres mucha experiencia profesional indirecta. Porque si estás en contacto con profesionales en activo, podrás llegar a conocer cómo es el día a día del trabajo, cuáles son las habilidades que más se valoran o qué errores debes evitar. E incluso si hay especializaciones que se estén buscando más en ese momento.
Más allá de todo esto, el networking te permite desarrollar competencias transversales muy demandadas por las empresas. Como, por ejemplo: comunicación, empatía, trabajo en equipo… Son habilidades que no siempre aparecen en el CV de forma oficial, pero que son interesantes.
Por último, no has de olvidar que mediante estas relaciones profesionales estarás creando tu reputación. Si se te percibe como una persona responsable, con iniciativa, con ganas de aprender, será más probable que piensen en ti cuando surja una oportunidad.
Cómo empezar a hacer contactos desde el centro educativo
Aunque creas que es imposible hacer networking si no has terminado tus estudios, nada más lejos de la realidad. El centro educativo es uno de los mejores lugares para empezar, puesto que este entorno ofrece muchas oportunidades para crear contactos. Y, lo mejor: de forma orgánica, natural y progresiva. Tus compañeros de clase serán el primer eslabón de tu red profesional. Ahora mismo estáis todos estudiando, pero el día de mañana cada uno trabajará en empresas distintas. Y mantener el contacto puede acabar por ser muy útil. Otro tanto de lo mismo sucede con los docentes, puesto que muchos colaboran con empresas o participan en proyectos externos.
Por otro lado, los centros de FP tienen convenios con empresas, charlas de profesionales o bolsas de empleo. Y participar de forma activa en estas iniciativas hará que puedas visibilizarte y crear relaciones profesionales.
Participa en proyectos, ferias y eventos del sector
Una de las formas más interesantes de hacer networking es participar en actividades que se enmarquen fuera de la rutina de clase. Por ejemplo, las ferias laborales, proyectos colaborativos, jornadas técnicas o incluso concursos que pudiera haber.
Las ferias laborales son, en particular, una excelente oportunidad para darte a conocer. Puedes mostrar interés por el trabajo de las empresas, hacer preguntas… La idea no es ir a conseguir empleo de forma inmediata, sino interesarte, aprender y establecer ese primer contacto.
Asimismo, es recomendable implicarte en proyectos prácticos, tanto dentro como fuera del centro.
Aprovecha tus prácticas para ampliar tu red
Sin duda, una de las claves para ampliar tu red es aprovechar al máximo el periodo de prácticas. Porque no solo te van a permitir aplicar todo lo que has aprendido, sino que estarás en contacto directo con profesionales en activo. Estos acabarán por convertirse en referencias clave para tu futuro.
Durante las prácticas, recuerda que tu actitud es clave: mostrar interés y responsabilidad, preguntar, ofrecer ayuda cuando sea posible y, sobre todo, tratar de aprender al máximo. Todo esto genera buena imagen, algo que tus compañeros y supervisores tendrán en cuenta.
Además, son muchas las empresas que usan estas prácticas como un periodo de prueba. Si desempeñas bien tu trabajo, esto se puede traducir en una oferta de empleo. O, al menos, en una recomendación. Incluso aunque no continuases en el trabajo, mantener el contacto es muy beneficioso.
Herramientas digitales para potenciar tu marca personal
Con un mundo cada vez más digitalizado, el networking no se limita al contacto presencial. Hoy en día, las herramientas digitales juegan un papel fundamental en la construcción de una red profesional. Y es indudable que la red más importante en este sentido es LinkedIn.
Es crucial que tu perfil de LinkedIn esté bien trabajado y muestre tu formación, tus prácticas, tus habilidades y cuáles son tus intereses profesionales. No es necesario que tengas años de experiencia: lo importante es presentar bien tu perfil. Además, podrás seguir a empresas, participar en conversaciones, unirte a grupos profesionales y mantener el contacto con personas que conoces en distintos eventos.
Consejos para mantener relaciones profesionales a largo plazo
Lo que debes tener claro es que hacer networking no es solo crear esos contactos, sino mantenerlos a lo largo del tiempo. Eso hace que sea muy importante que cuides las relaciones profesionales, siempre de una forma constante y natural. Un mensaje para saludar, para felicitar por un logro o para compartir información puede, sin duda, marcar la diferencia. La clave es aportar algo de valor; no debe ser ni oportunista ni unidireccional. Muestra interés genuino por los demás, comparte recursos útiles o recomienda algo interesante si surge la ocasión. Esto genera confianza.
Además, es crucial que seas paciente. Recuerda que las relaciones profesionales se construyen a largo plazo, los resultados no siempre son inmediatos. Pero, con el tiempo, una red cuidada es fundamental.
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